El año 2020 ha sido uno año de extraordinario crecimiento, cambios, desafíos, sorpresas, posibilidades y mucho más. No es sorprendente que muchas personas sientan como que el 2020 los ha desequilibrado. Es fácil perder de vista los principios eternos cuando nuestras vidas están patas para arriba. Estos principios eternos, el fundamento de nuestra enseñanza de la Ciencia de la Mente, son el enfoque de nuestros temas sugeridos para el año 2021.
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Este no es el momento para apartarnos de nuestro camino espiritual. Más bien, este es el momento para recordar lo que sabemos, aquello que es eterno, permanente y presente.
La verdad es que aunque de vez en cuando nos desviamos de nuestro centro, algo permanece sin ser tocado por los eventos mundiales y este algo siempre está disponible para nosotros mientras continuamos y evolucionamos en nuestro camino espiritual. ¿Qué es este algo? Es el campo creativo que llamamos la Mente, que algunos llaman la Divinidad.
También en el 2020, tal como hacemos al principio de cualquier ciclo nuevo, tomemos un momento para reconocer lo que ha ocurrido este año. ¿Qué hemos ganado, qué hemos perdido? ¿Qué lamentamos, y qué nos ha deleitado? Y entonces, enfoquemos nuestra creatividad para imaginar una realidad pospandemia para que la creatividad sagrada de la Mente pueda fluir a través de nosotros hacia un futuro inspirador.
¿Hacia dónde queremos ir y evolucionar en el año 2021? Establezcamos nuestras intenciones y tomemos los pasos para seguir adelante, sin olvidar que lo que nos hace soñar, crear y prosperar es la eterna presencia sagrada en nuestro interior.
Mis bendiciones,
Rev. Edward Viljoen, Líder espiritual
Centros para la Vida Espiritual
